29 de septiembre de 2010. El fantasma del cambio climático pretende alterar esta tendencia.

Un equipo de más de 300 científicos informó de los buenos de las medidas internacionales para eliminar los gases que afectan a esta capa y estimaron que se recuperará hacia 2050 los niveles que tenía en los años ochenta del siglo XX, gracias a los esfuerzos internacionales de conservación.

Lamentablemente descubrieron una relación entre esta y el cambio climático, la cual va a aumentar nuevamente el tamaño del agujero. Simplemente porque muchas de las emisiones implicadas en el cambio climático afectan también al ozono que hay en la atmósfera.

El Informe titulado “Evaluación científica del agotamiento de la capa de ozono 2010″, de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Al combatir este problema, señala el informe, se ha evitado la emisión anual de 80 giga toneladas de dióxido de carbono (CO2) equivalentes. Por su parte, el cambio climático tendrá una influencia creciente sobre el ozono en las próximas décadas. Los cambios en la capa serán consecuencia de las emisiones de gases de efecto invernadero de larga duración, sobre todo CO2, asociados a actividades humanas.

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