Unos 40 activistas de Greenpeace vestidos como pingüinos reclamaron el martes a la presidenta Cristina Fernández que participe de la cumbre climática que se realiza en Copenhague.

“Es necesario que la presidenta argentina concurra a Copenhague, como lo harán los demás miembros del G20, grupo al cual pertenecemos y que debería estar garantizando una negociación justa y vinculante de reducción de gases que afectan el clima“, dijo a periodistas Martín Prieto, director de Greenpeace Argentina.

Vestidos como pingüinos con trajes negros y blancos y máscaras, los activistas se echaron al suelo frente a la reja que rodea la casa de gobierno mientras se abanicaban bajo el sol.

“Cristina sálvanos, viajá a Conpenhague“, decían los carteles que levantaban en alto mientras sacudían los abanicos.

“Los pingüinos son una de las especies que están amenazada por la reducción de masa polar principalmente en el Ártico, así como el retroceso de la superficie de hielo de los glaciares. Nosotros en la Argentina tenemos documentado el retroceso de la masa de hielo de los glaciares Viedma y Upsala” en la Patagonia, explicó Prieto.

El funcionario argentino de mayor rango presente en la cumbre de Copenhague es el canciller Jorge Taiana.

Argentina forma parte de la Convención sobre Cambio Climático y del Protocolo de Kyoto.